Ejercicios de relajación para hacer en 5 minutos mientras trabajas

Pensar en la palabra relajar en efecto relaja.
Pero si pensamos mucho en cómo hacerlo y sobretodo en creer que existe una forma perfecta y única de hacerlo o sólo un lugar para hacerlo, dejamos de relajarnos.
Por eso hoy quiero compartirte 5 ejercicios de relajación muy sencillos para que los hagas en 5 minutos en casa mientras estás trabajando o dónde lo necesites y así alcanzar un estado de armonía. Aquí te contamos un poco más sobre qué es armonía y cómo encontrarla en el día a día.

5 ejercicios de 5 minutos para relajarte mientras trabajas

Reconoce tus sentidos: la mente reconoce como real todo aquello que pueda ser percibido como un estímulo mediante los sentidos, por esta razón, ejercitar la mente a través de V.A.K.O.G es una de las formas más básicas para estar presente.

1. ¡Hay un sistema dentro de ti que necesitas conocer para activar
tu botón de relajación!

No le creas a tu mente cuando te diga que sólo en el spa consigues relajarte. Recuerda que por más cliché que suene, el poder está dentro de ti. Esto nos lo confirma nuestro botón interno de relajación y hoy te enseñaré a activarlo.

Nuestro sistema nervioso se subdivide en dos: sistema simpático y sistema parasimpático. El primero es el encargado de ponerte en alerta, en situación de estrés y en disposición para reaccionar y atacar. Por la forma en que vivimos (afán, estrés e híper-productividad), ese es el sistema que mayoritariamente tenemos encendido. El sistema parasimpático es el encargado de hacer lo opuesto: de relajarte. Es el que te permite descansar, digerir tus alimentos, estar en el presente y sentir placer. Una forma muy sencilla de encender ese sistema es: respirar con tu barriga.

Pasos para encender tu sistema parasimpático con la técnica de respiración “barriga suave”:

1. 1. Pon tus manos sobre tu barriga y cuando inhales, infla tu barriga.
2. 2. Cuando exhales, desinfla tu barriga.
3. 3. Prueba inhalando contando hasta 4, sostén 3 segundos y exhala contando 4 y desinflando.
4. 4. Haz esta respiración por mínimo 3 minutos y sentirás la diferencia.

2. Permite que la lavanda y la manzanilla sean tus mejores amigas

Las plantas, las flores y los frutos están en la tierra para acompañarnos en nuestra misión de tener una experiencia lo más armoniosa y relajada posible. ¡Por eso existen la lavanda y la manzanilla! Ambas plantas te ayudan a relajarte, a activar tu sistema parasimpático y a que salgas de ese estado mental que está lleno de pensamientos compulsivos y muchas veces tóxicos. Acostúmbrate a tener aceite esencial de lavanda y usa 2 gotas para frotarlas en tu cien, en tus muñecas, en tu cuello y en la planta de tus pies. Es bueno que cuando inicies tu jornada laboral te pongas dos gotas en la palma de tus manos, las frotes e inhales tres veces el aroma de tus palmas. Esto ayudará a que tu cuerpo también relacione el trabajo como una actividad en la que te puedes relajar y ser productiva a la vez.

Por otro lado es muy bueno que te acostumbres a tomar una infusión de manzanilla una vez al día, las infusiónes funcionales momento de calma y momento ligero serán perfectas. Esto no solamente ayudará a tu relajación y a tener una mente más tranquila, sino a tu digestión también. Recuerda que no tienes que sufrir un ataque de pánico para activar tus herramientas de relajación; si lo haces de forma preventiva te darás cuenta que a tu cuerpo cada vez le parecerá más natural habitar un estado de tranquilidad, armonía y relajación que uno de alerta, estrés y angustia.

3. Cuando sientas mucho estrés y una mente que no es capaz de parar, dedícate a la escritura libre

La escritura ha sido reconocida a lo largo de la historia como una actividad terapéutica, pero por alguna extraña razón esa labor sólo la hacemos cuando nos lo piden en el trabajo y poco cuando nuestra alma la está necesitando. Escribir todo el estrés, las preocupaciones, el miedo, la ansiedad que estamos sintiendo es una forma muy efectiva de liberar espacio mental. (Encuentra aquí también ejercicios en casa para fortalecer la mente) Imagínate por un segundo cuando tu celular o tu computador te dice que la capacidad de la memoria está por llegar a su límite y te pide que por favor borres aplicaciones, fotos, vídeos. Lo mismo necesita hacer nuestra mente cuando está colapsada y la mejor forma de lograrlo es escribiendo absolutamente todo lo que estás pensando.

Pasos para escribir y liberar el estrés:

1. 1. Ten a la mano un cuaderno y esfero.
2. 2. Cuando sientas estrés, angustia, ansiedad o cuando hayas tenido una discusión laboral empieza a escribir todo lo que estás pensando o sintiendo.
3. 3. Te darás cuenta que al principio es probable que escribas tensionando el brazo, la muñeca o la mano y que al final te sentirás tan liberada que tu cuerpo también proyectará una imagen corporal de soltura y relajación.

Nota importante: La escritura libre no tiene que tener una gramática u ortografía perfecta; de hecho, no tiene que tener sentido. Es algo que haces para liberarte, no para presentarlo al público. Así que suelta el perfeccionismo y permítete relajarte mientras escribes.

4. Incluye pausas sin pantallas en tu jornada laboral

Generalmente nuestra mente se abruma porque pasa largas horas frente a un computador y muchas veces caemos en el error de creer que estamos tomándonos un descanso cuando nos conectamos al celular a revisar redes sociales o jugar. Si bien es cierto que estamos cambiando de “actividad”, seguimos exponiéndonos a pantallas y eso no relaja nuestra mente. Por eso te invito a que te tomes 5-10 minutos en la mañana y en la tarde para caminar, estirar, conversar con algún compañero de trabajo, tomarte la aromática de manzanilla y practicar mindfulness mientras lo haces. En el siguiente ejercicio te explicaré cómo hacer esto.

5. Practica el mindfulness en tus pausas sin pantallas

El mindfulness es el arte de estar aquí y ahora completamente presente. No necesitas cerrar tus ojos para lograrlo. (Si quieres aprender cómo meditar, aquí te regalamos una meditación guiada) Puedes practicarlo mientras te tomas un té y llevas tu mente a sólo concentrarse en esa actividad. No se trata de tomarte el té y revisar el celular o un documento. Es sólo tomarte el té. Mirarlo, olerlo, sentir el calor que emana de la taza, respirar mientras lo tomas, agradecer por poder acceder a una bebida caliente. Todas estas sensaciones de gratitud y de estar aquí y ahora nos proporcionan infinitas cantidades de bienestar y relajación. Así que no te dejes engañar con creer que necesitas hacer cosas muy difíciles para relajarte, con sólo estar presente mientras tomas té…será suficiente.

BONUS: último ejercicio para hacer en casa
A veces sólo necesitas acostarte

Por los ritmos en los que se mueve el mundo es muy probable que todos experimentemos fatiga crónica en alguna medida. Si bien es cierto que nos han enseñado que la productividad es uno de los valores más importantes a perseguir, la vida y la tierra también nos han demostrado que es momento de empezar a hacer las cosas distinto. Es momento de incorporar la pausa, la quietud y el silencio a nuestras vidas. Como práctica te recomiendo que destines 5 minutos mínimo de tu día a simplemente ser. Acuéstate en postura savasana (cádaver) que es acostarse boca arriba con brazos y piernas relajadas, palmas mirando al cielo. Puedes poner una canción que te relaje (te recomiendo mucho cualquier canción de la artista Snatam Kaur), cerrar los ojos y simplemente contemplarte. Esta postura siempre se hace al final de la práctica de yoga porque esta ciencia reconoce que para que se integre todo el trabajo físico, mental y emocional que se hacen con las posturas (y en este caso yo le agregaría todo el trabajo que despliegas en jornada laboral), es necesario acudir a la quietud al final.

¿Qué tal si pones en práctica estos sencillos ejercicios de relajación mientras trabajas? Incluso puedes hacerlo donde lo necesites y vas a notar un cambio en tu estado corporal y mental. ¿Tienes algún ejercicio de relajación que quieras compartir?

#SoyTOSH y #VidaEnArmonía